domingo, 28 de diciembre de 2014

El Camino del Corazón


"Todo lo que hace el sufí está orientado a la conquista de la Iluminación, a la apertura espiritual que le permita “acercar a la faz de Allah”, o lo es lo mismo, aniquilar el ego para experimentar con todo el Ser (y no sólo con la mente) la Unidad de todo lo creado, la Unión mística, en la que desaparece la separación entre sujeto que observa y realidad observada.

El sufí vuelve al corazón interior y lo usa como vehículo para alcanzar un entendimiento más avanzado. No toma la mente como principio, sino su corazón. Es decir, no usa una vía discursiva, sino sensitiva. 
Por ello al Tasawwuf (sendero del sufí) se le llama El Camino del Corazón." 
(Sufismo, La Enseñanza Mística, Madrid, 2005)


jueves, 25 de diciembre de 2014

Eres el alma de mi alma


Eres el alma de mi alma,
sin Ti no puedo resistir.
¡Qué me importa ir al paraíso,
si allí no Te voy a encontrar!
Cuando contemplo alrededor,
mis ojos ven tu grandeza;
y cuando hablo,
mis labios describen tu hermosura.
No habrá para mí otra búsqueda,
me perdí a mí mismo
por llegar a tu morada.
No sé dónde estoy ni en qué estado me hallo.
Mátame setenta veces si quieres,
igual que mataste a Cercis
Verás que este descarriado hijo tuyo
volverá a Ti setenta veces.
Yunus se quedó maravillado de Ti,
muéstrale tu belleza;
él seguirá siendo un derviche infeliz
a menos que le concedas tu alabanza.
Yunus Emre

El que da vida (Al-Muḥyī)


Cuando una obra de arte existe, el autor de dicho trabajo también existe.
Incluso si no podemos ver al artista en persona lo podemos ver en dicho trabajo.
Cuando somos testigos de su expresión artística creemos que el mismo existe.
El contemplar la pintura es conocer a quien la pintó; el contemplar una escultura es conocer a al escultor.
Si llegamos a reconocer el esplendor de nuestro propio ser con toda su extensión y poder, deberíamos inclinarnos ante Aquél que nos dotó con esa fortaleza y poder.

El Jardín de los Derviches
del Sheikh Muzaffer Ozak al-Yerrahi al-Halveti



miércoles, 17 de diciembre de 2014

Aquietar la mente para activar el corazón


La práctica regular del silencio prepara un lugar para el encuentro del amante y el Amado. Dentro del corazón, el amante y el Amado están siempre unidos, pero para tornarnos conscientes de esto, el ego y la mente deben hundirse en el amor.

El mundo de separación del ego se disuelve en las corrientes del amor que son activadas mediante el corazón. Técnicamente, el acto de concentrarse en el sentimiento de amor en el corazón activa el chakra del corazón, el centro psíquico que experimenta y genera el amor. El corazón comienza a girar, lo que genera más amor, que a su vez ayuda a aquietar la mente. A medida que la mente se aquieta más, el corazón gira a mayor velocidad, lo que actúa como reacción en cadena, aquietando más aún la mente. Eventualmente, el amor inunda completamente la mente. Este es el primer estadio de abstracción de los sentidos.


martes, 16 de diciembre de 2014

Deja ya tu egoísmo


"Deja ya tu egoísmo. 
No temas la pobreza. 
No persigas el oro y bebe, pues una vida tan llena de pesares hay que pasarla toda en un sueño profundo o embriagado con el Vino del Amor" 

Omar Khayyam 
La Taberna del Derviche


Danzar...


Danzar no es levantarse sin esfuerzo como una mota de polvo en el viento.
Danzar es alzarse sobre ambos mundos, haciéndose pedazos el corazón, 
y entregando el alma.
Danza donde puedas partirte en pedazos y abandonar totalmente tus pasiones mundanas.
Los hombres de verdad danzan y giran en el campo de batalla, danzan en su propia sangre.
Cuando se entregan, baten palmas; cuando dejan atrás las imperfecciones del sí mismo, danzan. 
Sus trovadores tocan desde adentro, y océanos enteros de pasión 
hacen espuma en la cresta de las olas.

Hz.Rumi (qs)

Halveti-Cerrahi Tekke - Estambul

domingo, 7 de diciembre de 2014

El cielo y el infierno


"No busques el cielo y el infierno en el futuro. 
Ambos están ahora presentes. 
Cada vez que logramos amar sin expectativas, cálculos, negociaciones, estamos de hecho en el cielo. 
Cada vez que nos peleamos, odiamos, estamos en el infierno". 
Shams Tabrizi



Egoísmo


En teoría, luchar contra el egoísmo parece simplemente algo bueno, moralmente aprobable, y hasta relativamente fácil, pero cuando se avanza por la senda se descubre que el egoísmo es mucho más que unos cuantos comportamientos claramente perversos: es..."nosotros mismos". 
Volvemos así a los primeros significados de la palabra Nafs. 
Hasta la bondad que creíamos perseguir está sembrada de egoísmo, y eliminar esos últimos rescoldos sólo puede hacerlo alguien entendido en las trampas más sutiles del Nafs. 
Ahí es donde empieza realmente el sufismo (el Tasáwwuf), y está reservado a unos pocos. 

Hz. Abdud Qadir Al-Yîlâni(qs) decía: 
“Os aconsejo romper vuestras vidas. Ahí hay ascensos que son dignos de un orgullo legítimo, según la Gente del Camino”

Una batalla continua


El Sheikh Daud al-Kabir,(qs) dijo:
“Quien encaja el Sufismo en palabras, no es un Sufí;
ni lo es el que busca señales del Sufismo en otra apariencia de la gente. 
El Sufí es quien incluso ha dejado el Sufismo atrás”.

Este camino no se sigue en paz.
Es una batalla continua.

Nuestro Profeta (swas), dijo a sus compañeros después de una gran batalla:
 “Ahora nosotros empezamos una batalla más grande”;
 
le preguntaron: “¿una batalla más grande?, 
él dijo: “Es la batalla con ustedes mismos, con sus propios egos”.

lunes, 17 de noviembre de 2014

Practica espiritual


Uno de los objetivos del Sufí es que nuestra vida diaria se convierta en una profunda practica espiritual.
Los sufíes creen que nuestras mentes y cuerpos son regalos de Dios y que, como signo de gratitud tendríamos que hacer lo mejor para desarrollar estos regalos y usarlos adecuadamente.

Cualquiera que recibe un hermoso regalo cuidara naturalmente como si verdaderamente lo apreciara. Mi Sheik acostumbraba a señalarme que si alguien le compraba un hermoso y oneroso sombrero, uno que le quedara perfectamente, no estaríamos agradecidos a esa persona? Si uno esta agradecido a quien le regalo el sombrero, que tan mas agradecidos tendremos que estar con quien nos regalo la cabeza para ponernos ese sombrero.

El conocedor de Allah


Un piadoso conocedor de Allâh (Arîf bi Llâh) lloraba toda la noche y decía: 
«Si me castigas, muero amándote Allah; 
y si me haces Tu misericordia, sigo amándote».
Y comentó esta palabra diciendo: 
«Los Conocedores ('Ârifûn) temen más olvidarse de El que el castigo que se pueda recibir».

[Tahqîq Kalimat Ul Ikhlâs]